SOPAS Y CREMAS
Cada preparación es una fantasía danzante, es un homenaje a la fusión de lo que nos regala la Madre Tierra.
Es casi como si pudiéramos recorrer lugares, paisajes y lo que allí se cultiva. Sus sabores, sus colores, sus productos autóctonos los tomamos de la mano del campesino y sentimos las bondades hechas vegetales. Los tubérculos, las leguminosas, las proteínas las mezclamos mágicamente con especias lejanas y propias para deleitarnos y sucumbir ante sus texturas, ritmos y peculiaridades. Ese olor que penetra nuestra alma, esa variedad que se hace mezcla, esos nutrientes que alimentan nuestro cuerpo y lo hacen suyo.
Cremas suaves, inmensas, sutiles, emblemáticas, únicas. Ellas nos acompañan y nos hablan del amor por lo propio y por lo universal.