1. Eres más feliz
El objetivo principal del desarrollo personal es ser más feliz. Naturalmente, cuando te mejoras a ti mismo, tu vida, tus relaciones, logras tus metas, eres más feliz. Esto no siempre sucede de inmediato; necesitarás convertir los objetivos que te marcas en rutinas que se vuelvan consistentes en el tiempo.
2. Aprendes cosas nuevas
Un componente importante del desarrollo personal es la educación, el aprendizaje contínuo y el conocimiento. No sólo puedes aprender nuevas habilidades, conocimientos y competencias duras, sino que también puedes aprender sobre ti mismo, sobre los demás y sobre el mundo que te rodea. A través del aprendizaje, se aprende a poder distinguir y valorar diferentes puntos de vista, valores y creencias. Aprenderás destrezas que no se enseñan en el colegio, como por ejemplo, cómo establecer metas y cómo tener relaciones saludables.
3. Tienes una mayor capacidad de adaptarte al cambio
Cuando aceptas, aceptas y buscas cambios para ti y tu vida, eres mejor aceptando y adaptándote a cambios inesperados o fuera de tu control, ya sean buenos o malos. O incluso al cambio que impulsa tu propio desarrollo personal. Pero con una base sólida, es más probable que estés contento y satisfecho con tus logros, o que seas más capaz de lidiar con la ansiedad y las emociones negativas que puedan surgir.
Este producto no garantiza la obtención de resultados. Las referencias al desempeño de una determinada estrategia no debe ser interpretada como una garantía de resultados