Después de los 40, no solo se trata de tacones
Siempre he tenido un gusto muy especial por el estilo, la moda y todo lo que tenga que ver con este mundo. Eso me llevó a querer certificarme como asesora de imagen, porque una vez que entendí que la imagen fue parte importante en mi proceso para reencontrarme con mi esencia y no desde la superficialidad; decidí que de la misma manera podía acercarme a cada persona que estuviera buscando transformar su vida, para ayudar a esas mujeres que sienten que han llegado a una etapa en la que por diferentes situaciones han perdido su identidad y les cuesta comunicarse con el mundo a través de su imagen, y para todas las que sienten que quieren ser protagonistas de su vida y NO víctimas de la moda. Para ayudar a esas mujeres que pueden estar necesitando de esa respuesta que, como yo, estuve buscando por mucho tiempo.
Quiero decirte que cada etapa tiene sus maravillas, que es muy normal encontrarnos envueltas en esta necesidad de volver atrás, de vernos más jóvenes, de ser lo que alguna vez fuimos y de detener el tiempo para no “dejar de ser hermosas”. Déjame decirte que eres hermosa y que jamás dejarás de serlo. Tu belleza será diferente, no solo porque el físico va a cambiar, sino porque te verás con otros ojos, sabiendo cosas que antes no entendías o que sencillamente no te hacían falta. Así que he creado esta guía para ti, con el fin de mostrarte el camino para construir tus mejores versiones desde un estilo coherente, lo que al final siempre se traducirá en “amor propio”, porque lo más importante es que te sientas bien y te diviertas con lo que uses; que la ropa sea un medio para expresar lo maravillosa que eres y no un problema que te limite.
Aquí la idea no es aprender cómo detener el tiempo y ser joven por siempre, pero sí te ayudará a que te sientas y veas lo más joven y radiante posible en cada etapa de tu vida, y luzcas toda esa belleza que tienes, sin ponerte años antes de tiempo.
Disfrútala mucho. Con amor,
Angélica