PONTE EN FORMA
¡Recuerda, lo importante es disfrutar del camino!
#1. Establece un horario de entrenamiento y tómatelo como un tiempo solo para ti
Sabemos que la falta de tiempo es un problema muy habitual a la hora de ponerse en forma. Esto es en parte porque existe el mito de que hay que entrenar prácticamente todos los días y echarle un montón de horas al deporte.
Lo primero es que tu plan para ponerse en forma tiene que ajustarse a tu estilo de vida. Si tienes mucha disponibilidad para entrenar es genial, pero si no es tu caso, ¡no te preocupes!
Lo importante es que puedas encontrar cada semana un tiempo que dedicarte a ti y a tu salud.
Es mejor hacer dos sesiones de 20 minutos a la semana (y cumplirlo), que intentar entrenar 5 días a la semana durante hora y media (y dejarlo a la segunda semana). Ajusta tu rutina para incluir entrenamientos más cortos pero intensos, como las sesiones de HIIT (High Intensity Interval Training). También puedes aprovechar momentos del día para realizar actividad física, como caminar o ir en bicicleta al trabajo.
#2. Aprende a escuchar a tu cuerpo
Escuchar a tu cuerpo te permitirá entrenar de manera más eficiente y evitar posibles lesiones.
Es un aprendizaje que te puede llevar un tiempo. Al principio puede costar un poco medir tus fuerzas, con paciencia podrás identificar esos días en los que puedes con todo y esos otros en los que te lo tienes que tomar con más calma.
#3. No te compares con los demás
Cada persona (y su progreso) es diferente. En lugar de compararte con otras personas, enfócate en tus propios logros y en cómo te sientes a lo largo del camino. ¡Esto no es una carrera ni una competición!