¿Qué es y para qué sirve la formalización?
La formalización de una empresa es un proceso multidimensional y gradual que ocurre cuando sus emprendedores se ocupan de su apertura comercial, la búsqueda de insumos, la propia producción de bienes y servicios, la comercialización y el pago de tributos.
La formalización de una empresa trae consigo grandes beneficios, genera productividad, rentabilidad y crecimiento. ¡Descubre la importancia de estar del lado legal de la economía!
La formalización de un negocio es una de las mejores iniciativas que puede tener un emprendedor a la hora de incorporarse al mercado, debido a que refiere un proceso que gestionan las empresas para ser parte de la economía formal.
En el sentido económico es la puerta de entrada a una mayor rentabilidad y en consecuencia, a un mejor crecimiento. Además, en el ámbito social se tienden a reducir los cuadros de pobreza al incrementase las oportunidades de trabajo.
En este artículo te mostraremos qué se entiende por formalización, sus beneficios, cuáles son los requisitos para legalizar una empresa y por qué resulta importante encontrarse en el lado formal de la economía.
¡Sigue leyendo!
¿Qué se entiende por formalización?
Cuando te preguntas qué es la formalización de una empresa, se refiere a un proceso multidimensional y gradual que ocurre con una organización cuando sus emprendedores se ocupan de su apertura comercial, la búsqueda de insumos, la propia producción de bienes y servicios, la comercialización y el pago de tributos.
Define igualmente un proceso de coordinación entre el emprendimiento, el negocio en sí y la entidad oficial. Asimismo, su actividad mantiene centralizada la toma de decisiones cuando se trata de organizaciones de mayor rango, lo cual implica una diversidad de acciones y, por supuesto, un volumen de tareas.
En pocas palabras, es dar cumplimiento a procedimientos legales y que estos tengan una constancia en un expediente oficial. Este trámite ofrece seguridad jurídica, le brinda protección a la empresa y pone de manifiesto la legalidad del negocio.
Entre otros alcances la formalización facilita licitaciones y procesos de selección cuando existe la iniciativa de realizar contrataciones con el Estado. Además, abre la posibilidad de que el negocio pueda participar en eventos comerciales.
Sin embargo, para tener una vida activa en el mundo económico y legal es preciso agilizar un documento en el que se describe a detalle el tipo de empresa que tienes pensado constituir, tus datos y los de tus socios, la dirección comercial, el aporte económico, la fecha de inicio de las actividades, los permisos de rigor, la facturación, el debido registro de estos documentos, y otras series de exigencias que deberás cumplir al momento de llevar a cabo la formalización.
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¿Por qué es importante la formalización?
Debes entender que la importancia de dar de alta a una empresa implica un medio de inclusión económica y social en cualquier mercado.
Es por eso que tiene por finalidad que la organización constituida genere mayor productividad, y en consecuencia, ingrese al sistema financiero y alcance sostenibilidad.
Entre otros aspectos, la formalización sirve para dar garantía a lo siguiente:
- Genera beneficios sociales al insertar a los trabajadores en la seguridad social.
- Da cumplimiento de las normas para la protección de los consumidores con relación a su salud.
- Se compromete con el pago de tributos a la administración pública.
Ventajas que propone la formalización
Este tipo de legalidad plantea una serie de ventajas, veamos algunas de ellas:
- La actividad del negocio o del emprendimiento se hace pública.
- Los clientes tienen una referencia legal de la actividad que realiza la organización en cuestión.
- Ofrece seguridad jurídica.
- Brinda protección a la empresa y le otorga legitimidad a la iniciativa que se registra.
- Permite que la organización pueda participar en licitaciones y en procesos que libra el Estado para seleccionar proveedores de bienes y servicios.
- Posibilita la participación en eventos comerciales.
- Facilita que los emprendedores puedan acceder al Sistema Financiero.
- Abre la posibilidad de créditos.
- Hace factible que se participe en ruedas de negocios y otros esquemas de negociación en cualquier ámbito, sea nacional o internacional.
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¿Qué beneficios podemos obtener de la formalización?
Entre otros beneficios que se obtienen al llevar a cabo este proceso, se encuentran:
Lograr una mejor posición en el mercado
En el mundo de los negocios es vital tener un buen posicionamiento. En este sentido el marketing ayuda a los emprendimientos, a las marcas, o a la generación de bienes y servicios, a ocupar un lugar en la potencial elección del consumidor.
La pregunta que cabe es cómo la formalización puede incidir en que tu negocio logre alcanzar un mejor posicionamiento en el mercado.
En primer lugar esta formalidad, como bien lo indica, tiende a generar confianza en los clientes.
¿Por qué?
Una vez que los consumidores comprueban que la marca está patentada, que posee un registro, y que se recibe una factura con el logotipo que identifica al negocio, su confianza se expande por el tipo de atención que considera conveniente.
Hay diferencias que subsisten en las compras formales y las informales. Por eso no es lo mismo ir a un pequeño negocio o a un supermercado y examinar las características de determinado producto, o probarse una prenda cualquiera, que adquirir un producto en plena calle sin regulación sanitaria, ni facturas, ni garantía.
El registro de tu organización y de los activos trae consigo múltiples beneficios para el negocio.
Acceso al crédito
Uno de los mayores beneficios que se obtienen de una condición formal en el mercado, es la posibilidad de acceder a un crédito, lo cual representa la posibilidad de crecimiento.
Es uno de las grandes oportunidades que se pueden precisar cuando se tiene un rango formal. Es decir, se logra acceso al crédito, lo cual se considera la base para que todo negocio despegue.
Igualmente, es posible crear asociaciones estratégicas, escalar, crecer, lo cual indica nuevos mercados, sucursales, franquicias, diversificar la cartera, aumentar la producción y, por tanto, obtener rentabilidad.
Abrirse al mercado internacional
En el mercado global el interés de las marcas es poder expandirse fuera de las fronteras. La exportación de los bienes y servicios que se produzcan en el país de origen pueden hacer posible estos alcances cuando el emprendimiento se encuentra formalizado.
Por supuesto resulta complicado, si estás en condición informal, proyectarte hacia los mercados internacionales. Esta situación indica que la formalización de tu emprendimiento le va mejor cuando puedes pertenecer a grupos o asociaciones gremiales y comerciales que planifican asesorías y mecanismos de exportación para sus afiliados.
Derecho al crédito fiscal
Al adquirir los productos para tu negocio con facturas debidamente formalizadas tendrás derecho al crédito fiscal. Como bien sabes, el crédito fiscal es lo que una empresa cancela por concepto de impuestos cuando se genera una compra y que se llega a deducir ante la entidad pública cuando se efectúa una reventa.
Participación de licitaciones públicas
Cuando te propones realizar negocios con el Estado sueles hacer cálculos volumétricos, es decir, recibirás un encargo muy grande, por lo general. Esta situación solo es posible cuando se tiene un registro formal, lo que te permitirá participar en la lista de proveedores.
Contribuir con el país
Los negocios con rango formal pagan impuestos, y precisamente la recaudación de impuestos es lo que permite al Estado hacer inversiones. Asimismo. le permite gestionar las diversas demandas de bienes y servicios que solo los negocios formalizados pueden asistir.
¿Cómo formalizarse?
Hay una serie de requisitos para formalizar o dar de alta a un emprendimiento o un negocio determinado, para ello se deben seguir los siguientes pasos:
1. Buscar y reservar el nombre
Solo tienes que completar un formulario con algunos datos relacionados. Este procedimiento se lleva a cabo en el Registro Público. En caso de que el nombre ya exista se debe colocar en una segunda opción otro nombre.
2. Elaborar el documento de constitución
En este documento tienes que poner el nombre del representante del emprendimiento y el de los socios. Y cada uno de sus aportes monetarios o en su defecto, bienes tangibles que son avalados por un contador público.
Igualmente se consigna el nombre del negocio, la dirección, el estatuto que rige la constitución legal, que son también normas para operar en el mercado. También la razón social del emprendimiento, es decir, a qué se va a dedicar. Este documento debe ser suscrito por un abogado.
3. Trámites para que el documento sea legal
Una vez que tienes en tus manos el documento, se lleva ante a la revisión de un notario, lo que le otorga la formalidad que aspira. Es el momento de estampar la firma del notario y de cada uno de los socios.
4. Inscribirlo en el registro público
Otro de los pasos a seguir es llevar el documento ya notariado al Registro Público. Se consigna ante este organismo la reservación del nombre y la constitución legal del negocio.
5. Certificarse como contribuyente
El pago de impuestos ante el Estado le confiere la posibilidad al negocio de optar por los beneficios que propone la oficialidad, ya que el emprendimiento comenzará a operar como persona jurídica. Este certificado en muchos países se puede obtener online.
¿Qué efectos produce la formalización?
La formalización ofrece una base legal para que los emprendimientos puedan operar y realizar negociaciones con entes públicos o privados. Desde esta condición pueden emitir facturas, pagar impuestos y conformar un sistema de relaciones que no sería posible si se mantuvieran al margen de la ley, es decir, en una situación de informalidad.
De igual manera, los emprendimientos pueden optar por los créditos y financiamientos que otorga el Estado.
Pueden también vincularse a las cámaras de comercio o asociaciones del ramo, los cuales disponen de programas que facilitan determinados trámites operativos y legales.
¡Conoce cómo puedes crecer con la formalización de tu negocio!
Cuando te preguntas por qué es importante formalizar una empresa debes saber que entre las ventajas que presenta la constitución de tu iniciativa de negocio, se encuentra la inclusión económica y social que ofrece el Estado.
En caso de que estuviera funcionando informalmente no podrías acceder a los múltiples beneficios que se obtienen tanto de los organismos oficiales como de las empresas privadas.
De manera que al formalizar tu emprendimiento es posible alcanzar una mayor rentabilidad y crecimiento.
Así que… ¡no dudes más y formaiza de tu empresa!
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