¿Por qué la gestión del conocimiento es importante para tu empresa?

La gestión del conocimiento (del inglés, Knowledge Management) es un conjunto de estrategias utilizadas dentro de las organizaciones para potenciar resultados.

En una sociedad en la que el conocimiento es tan bien reconocido y deseado principalmente por profesionales que quieren destacarse, es prácticamente imposible intentar hacer mejoras en un negocio sin pensar en la adquisición de conocimientos específicos.

Todos los días estamos impactados por nuevas informaciones que pueden ayudarnos a mejorar algún aspecto tanto de nuestras vidas personales como profesionales.

Pero de nada sirve recibir todas esas ideas si no sabes cómo usarlas a tu favor y, principalmente, a favor de tu negocio.

¿Te parece difícil?

Sigue leyendo este post y te aseguro que entenderás mejor el concepto de gestión del conocimiento y sabrás cómo se puede aplicar en tu empresa.

¿Cuál es la importancia de la gestión del conocimiento?

El concepto de gestión del conocimiento es relativamente reciente en el mundo de los negocios.

Desde hace unos años, trabajar estrategias que posibiliten el crecimiento intelectual de las organizaciones se ha convertido en una prioridad. Los gestores, entrenadores y dueños de empresas comenzaron a darse cuenta de la importancia de agregar valor a los procesos en sus empresas.

El enfoque de gestión del conocimiento no está solo en los resultados y el crecimiento financiero, sino en los resultados y el crecimiento personal. Son estrategias completas que generan beneficios para la empresa como un todo, pero principalmente para los emprendedores y empleados que actúan en la organización.

1. Ventajas de la gestión de conocimiento para los empleados

Cuando es aplicada la gestión del conocimiento, todo el potencial individual de los empleados es optimizado y aprovechado de la mejor manera posible.

Cada una de las personas que trabajan en una empresa posee saberes y conocimientos útiles para el desarrollo de los procesos empresariales.

Sin embargo, muchas veces, ese conocimiento no es utilizado y termina incluso pasando desapercibido por los gestores.

Los ambientes en los que el conocimiento es trabajado e incentivado constantemente tienden a ser más creativos, con generación de valor para quien aprende algo nuevo y principalmente para compartir experiencias.

Los empleados que se insertan en organizaciones que se preocupan por la gestión del conocimiento logran trabajar mucho mejor y crecer junto a la empresa.

2. Ventajas de la gestión del conocimiento para los emprendedores y las empresas

Los emprendedores que están al frente de la empresa, así como la propia empresa, ganan con la gestión del conocimiento porque ese proceso no es específico de un área o sector, sino que abarca a toda la organización.

Tal vez el principal beneficio para la empresa sea la creación de valor. Pero no se trata de valor financiero o de mercado, sino de valor agregado.

El conocimiento generado, compartido y mantenido dentro de la empresa se convierte en productividad, perspectivas más humanas y procesos cada vez mejores.

Consumidores, clientes, socios y sociedad en general pasan a ver a la empresa como una organización diferenciada. Es decir, su valor interno gana destaque.

Las organizaciones están formadas por personas, espacios físicos, procesos, herramientas y la propia cultura de la organización (pensamientos, creencias y desafíos).

La gestión de conocimiento busca trabajar todos estos aspectos de forma simultánea.

No se trata de aprendizaje organizacional (con foco en los empleados), sino del uso y aplicación efectiva del conocimiento empresarial.

Herramientas de gestión del conocimiento

Ahora que has entendido la importancia de la gestión de conocimiento para quienes trabajan, quienes emprenden y también para la empresa, es hora de conocer las mejores herramientas para poner esta estrategia en práctica.

Conoce ahora 8 recursos poderosos que se pueden aplicar dentro de una empresa y sus beneficios.

1. Gestión de la información

Día tras día las empresas se ocupan de diversas informaciones, independientemente de que tenga un negocio online o físico.

Por esa razón, saber cuáles son las informaciones más importantes, cuáles deben ser filtradas y descartadas y cuáles deben ser transmitidas a los empleados es fundamental.

Además, hay que estar seguros de cuáles serán los destinatarios de la información, para poder potenciar los resultados y reducir los errores.

La gestión de la información está relacionada con el control de la información dentro de la empresa. No solo con relación a su distribución, sino también a la obtención y análisis.

Sin una buena gestión de la información, los datos se pierden dentro del negocio, llegan a destinatarios equivocados y causan confusión operacional.

La gestión de la información se relaciona con la gestión del conocimiento en la medida en que la información y el conocimiento son conceptos aproximados, pero que a menudo se confunden.

El conocimiento se transmite conjuntamente con la información compartida. Garantizar la calidad de la información es garantizar, por consiguiente, la calidad del conocimiento.

2. Educación corporativa

La educación debe ser entendida como un proceso más amplio que la simple realización de entrenamientos y calificación profesional de los colaboradores.

Los entrenamientos son fundamentales para garantizar el nivel de calidad y conocimiento dentro de la organización, pero la educación corporativa va más allá.

Para garantizar una buena gestión del conocimiento es fundamental que las potencialidades individuales de los colaboradores sean explotadas. Todo esto debe hacerse junto al crecimiento de la empresa como un todo.

Diplomas profesionales y horas de entrenamiento son buenos indicadores de mercado, pero no son suficientes para medir el nivel de conocimiento y valor agregado.

En líneas generales la educación corporativa es el resultado de la gestión de conocimiento junto a la gestión de personas. Cuando estos dos procesos se trabajan, los objetivos a largo plazo de la empresa se pueden lograr de forma más eficiente.

La educación es pensada para permitir la continuidad de la empresa a lo largo del tiempo, con elevación continua de los niveles de calidad internos.

Por eso, el foco debe estar en la aplicación de estrategias completas que sobrepasen el mero entrenamiento de los colaboradores. Incluso el entrenamiento debe ser repensado para permitir el crecimiento real de todos los colaboradores, con optimización para la misión y objetivos de la empresa.

3. Inteligencia corporativa

La inteligencia corporativa está representada por la suma de todas las inteligencias individuales.

El potencial intelectual dentro de las empresas es inmensurable. Poner en práctica estrategias que apunten a utilizar ese potencial en favor de la misión empresarial es siempre deseable.

En términos conceptuales, la inteligencia corporativa representa la integración entre personas, herramientas, prácticas y procesos.

Tener buenas herramientas, actualizadas, procesos ricos y bien estructurados es importante. Pero también lo es el saber integrar todos estos aspectos, generando lo que llamamos inteligencia corporativa.

Se trata del nivel de compatibilidad entre todas las áreas de la empresa.

La inteligencia de una organización puede ser medida en base a la capacidad de integración entre las más variadas partes que la componen. Sin esa integración, sin un correcto intercambio de informaciones y de saberes, la inteligencia se pierde.

4. Gestión de conocimientos organizacionales

Para realizar la gestión del conocimiento organizacional es imprescindible poner en práctica técnicas y estrategias variadas.

Entre ellas está la creación de canales de comunicación claros y eficientes, descentralización de los procesos de formación de ideas, presentación de soluciones y estimulación del perfeccionamiento individual.

Dentro de la organización existen saberes infinitos, una gran masa creativa y energía productiva. Estas son dimensiones muy ricas que pueden contribuir al crecimiento de la empresa no solo en el sentido financiero, sino también personal.

5. Gestión de competencias

Hay competencias que son útiles para el contexto empresarial. Para cada modelo de negocio, se requieren diferentes competencias. ¿Cómo hacer la gestión de esas competencias, para crear un ambiente productivo, rico y creativo? La respuesta está en la gestión de los empleados, centrándose en el potencial de cada uno de ellos.

Todas las características positivas deben ser estimuladas, mientras que pequeños errores deben ser solucionados. La gestión del conocimiento pasa necesariamente por la mejora de las competencias individuales, para que se transformen en competencias globales, de la propia empresa.

Esta transformación del potencial individual en valor agregado es fundamental para el crecimiento de la organización en el mercado. Profesionales competentes hacen empresas competentes.

6. Mejores prácticas

Todas las prácticas internas de una institución pueden mejorarse y perfeccionarse con el tiempo.

La gestión del conocimiento nos muestra que el nivel de calidad, en todos los sectores, no presenta un límite máximo. Por el contrario, es posible crecer y mejorar cada vez más.

Para llevar a cabo mejores prácticas empresariales es necesario el seguimiento, el análisis de la información y los experimentos.

Para que los cambios sean abrazados por todos los colaboradores – y no rechazados, como sucede en muchas empresas – las prácticas deben ser analizadas con la ayuda de todos los involucrados.

Hacer que los destinatarios de los cambios se sientan partícipes en el proceso de transformación es fundamental para garantizar la aceptación.

Siempre que sea posible, los gestores deben consultar a su equipo, entender qué prácticas necesitan ser mejoradas y cómo hacerlo para optimizar las experiencias y procesos.

7. Gestión de talentos

Tener buenos talentos dentro de la empresa es un gran diferencial.

Sin embargo, ocurre que, a menudo, los talentos existen, pero no son conocidos por los gestores, entrenadores y emprendedores.

El potencial desperdiciado es un serio riesgo para el crecimiento de la organización, que a pesar de contar con buenos profesionales, no logra extraer lo mejor que ellos tienen que ofrecer.

Para solucionar este problema, la gestión de talentos es indispensable.

Se trata de la implementación de estrategias que permitan identificar los talentos existentes dentro de la empresa, potenciando y explotando cada uno de ellos. Todo sobre la base de los valores y la misión de la empresa.

Además, la gestión de talentos permite desarrollar habilidades que tal vez estén dormidas, lo que contribuye al aumento del nivel de conocimiento organizacional.

8. Desarrollo de personas

Por último, pero no menos importante, el desarrollo y la capacitación de personas, una de las grandes estrategias de gestión del conocimiento para las empresas.

Los empleados de cada empresa – y aquí estamos hablando de todos ellos, desde los técnicos, al soporte, pasando por el personal administrativo y los servicios generales – deben recibir atención continua.

Cuando las personas que actúan en una empresa crecen, el negocio también crece.

Este es el resultado lógico de la buena gestión de personas, que debe ser hecha de forma completa y orgánica. El sector de recursos humanos de la empresa es muy importante en este proceso.

La gestión del conocimiento es uno de los varios procesos que deben implementarse en un negocio para lograr el éxito y crecer en el mercado.

Sin embargo, hay muchos otros procesos igualmente importantes, todos con sus características y peculiaridades.

Si eres un emprendedor o trabajas con la gestión de personas en una empresa y quieres saber más sobre este tema, lee nuestro post que te muestra todo sobre la capacitación empresarial y piensa cuál es la mejor para tu negocio.