Ya estudiaste la 1ª Revolución Industrial, ¿verdad?

Entonces sabes que para llegar a las configuraciones que tenemos hoy, hubo un largo proceso de constantes revisiones de las condiciones de trabajo: antes, los empleados eran vistos como piezas sustituibles. Ahora, estamos cada vez más conscientes de la importancia de la gestión de personal.

Hasta el término cambió: los que antes eran empleados, hoy, son colaboradores. O sea, más que ejercer una función específica en el negocio, sabemos que el equipo colabora directamente con los resultados de una organización. Y es justamente por eso que es tan importante invertir en este recurso.

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El concepto de gestión de personal

Un negocio necesita ser gestionado para mantenerse saludable. Entran en esa lista la gestión financiera, administrativa, de insumos y también de las personas.

El concepto de gestión personal tiene que ver con ocuparse del recurso para que produzca resultados.

Hacer una buena gestión de personal,  es más que reclutar y seguir las normas laborales.

Lo importante es administrar los colaboradores de manera que ellos le entreguen lo mejor de sí al negocio. Aquí estamos hablando de retención, valoración y motivación del capital humano.

Podemos decir que la gestión de personal no se restringe a un sector, como el Departamento de Personal y de Recursos Humanos, sino que debe practicarse en todas las áreas del negocio, concentrándose en hacer todo el ambiente de trabajo más armonioso, productivo y participativo.

Los 5 pilares de la gestión de personal

Cuando hablamos de pilares, nos estamos refiriendo a determinados conceptos sobre los cuales se sostiene la gestión de personal. Es decir, sin ellos no lograría mantenerse sólida. Por eso, todos deben ser protagonistas.

1. Motivación

La gestión de personal comienza y termina en la motivación.

Profesionales motivados trabajan mejor, se relacionan más armoniosamente y entregan resultados más significativos.

Muchos gestores aún creen que la motivación parte de las inversiones financieras, pero se equivocan.

Claro, la noticia de un aumento es siempre bienvenida.

Sin embargo, el tema es más profundo, para que el colaborador entregue lo mejor de sí en las actividades que desempeña, necesita una figura de liderazgo, que realmente estimule su desarrollo personal y profesional, además de una buena dosis de confianza mutua.

2. Comunicación horizontal

La comunicación es otra clave de la gestión de personal.

Antes la configuración estándar de un negocio era jerarquizada, cuando las opiniones de los liderados eran subordinadas a las de los líderes. Pero este cuadro ya no tiene nada que ver con los nuevos modelos de negocio.

La palabra del momento es diálogo.

El incentivo a una cultura de feedback es una de las mejores formas de mejorar la comunicación dentro de una organización. Así, todas las voces son oídas y consideradas importantes para la constante evolución del negocio.

La consolidación de una cultura de comunicación horizontal es una excelente forma de perfeccionar constantemente los procesos internos. Al final, nadie entiende más lo que hay que hacer o mejorar que quien se ocupa directamente de determinada tarea: la percepción es más global cuando no hay topes jerárquicos.

3. Trabajo en equipo

El trabajo en equipo es un clásico de la gestión de personal y con toda razón: la cultura de cooperación y de colectividad normalmente es más beneficiosa que la del individualismo.

Para eso, la figura del líder es esencial, pues es él quien va a mantener a los profesionales alineados con respecto a un mismo objetivo.

La idea central del trabajo en equipo es que todos tengan la sensación de pertenecer a algo mayor que cada uno.

Todas las competencias y habilidades diversas en un equipo contribuyen a la construcción de un todo más exitoso.

4. Valoración de competencias

En la gestión de personal, la importancia de la valoración de competencias es muy clara. Eso va desde la organización de las rutinas de trabajo — distribuyendo los colaboradores en los sectores y funciones en los que se desempeñan mejor — hasta el reconocimiento de los trabajos realizados — premios, bonificaciones y títulos de destaque.

Evaluar constantemente el desempeño de los profesionales es esencial.

Cuando los resultados son positivos, los gestores deben empeñarse en felicitar al equipo y reconocer sus méritos. Cuando son insuficientes, se pueden dirigir mejor las demandas y promover estímulos estratégicos.

5. Desarrollo profesional

Por último, pero no menos importante, el 5º pilar de la gestión de personal está relacionado a una cultura de aprendizaje continuo.

Invertir en el equipo es promover la evolución profesional de los colaboradores por medio de cursos, entrenamientos y conferencias, por ejemplo.

Otra forma de estimular el perfeccionamiento de los profesionales es elaborar algún programa de gratificaciones para los que invierten en la propia capacitación.

Descuentos para estudios de grado y/o posgrado o reajustes en la banda salarial por matrícula en cursos de extensión en algún área de interés para el negocio, son posibilidades que les van a agradar mucho a tus profesionales.

La importancia de la gestión de personal

Hoy en día, la clave de un equipo con buenos resultados no está solo en la remuneración, tampoco en los beneficios.

¿Todo eso es importante? ¡Por supuesto! Sin embargo, no es raro encontrar personas que ganan buenos salarios pero no son felices en su actividad profesional.

Lo que verdaderamente lleva al 100% de dedicación a las actividades es el compromiso — con el ambiente, con la función y con los valores del negocio.

De esta forma, el compromiso con la calidad se vuelve genuino, es decir,  sobrepasa la obligación prevista en el contrato de trabajo.

Con un buen trabajo de gestión de personal, los colaboradores se sienten parte viva y esencial para el negocio.

Es tan bueno cuando uno se siente necesario, ¿no es verdad? Este sentimiento colectivo de compromiso trae logros muy importantes para la organización, como:

• coherencia con la misión;
• aumento de productividad;
• retención de talentos;
• ambiente de trabajo saludable;
• equilibrio entre expectativas;
• más calidad en los productos y servicios.

El cuidado con los colaboradores y los resultados

Como viste, la gestión de personal se basa en algunos pilares que, sobre todo, valoran al profesional.

Las empresas empeñadas en la calidad de sus productos o servicios saben que tener colaboradores capacitados, comprometidos y satisfechos con su ambiente de trabajo marca la diferencia en los resultados.

Por eso, si tienes gente trabajando para tu negocio, no dejes de aprovechar este importante recurso.

Invierte en la gestión de personal y muéstrale a tus colaboradores que son esenciales y que marcan la diferencia. Te darás cuenta de cómo su motivación para el trabajo aumentará.

¿Quieres más sugerencias para desarrollar a tu equipo?

Lee aquí cómo capacitar a tus colaboradores con un entrenamiento empresarial.